TERMAS ROMANAS DE CAMPO VALDES

Por fin he visitado las termas romas de Gijón, situadas en la falda del Cerro de Santa Catalina.
Eran de uso público, podían incluso entrar los esclavos y tenían un precio módico. Son de tipo pompeyano.
La fecha que se le atribuye está entre el siglo I y el primer tercio del siglo II d. C.
La visita al museo empieza con una proyección que nos da una visión de las termas y su función. Continua con una zona de paneles informativos, maquetas y restos encontrados, entre los que se pueden ver las tegulas (tejas), que fue lo que mas me llamó la atención, por ser similares a las que hay todavía.

Hipocausto de arquillos de la sala de sudoración

Luego viene el recorrido por los restos arqueológicos por medio de una pasarela, que reproduce el funcionamiento de los baños: el vestíbulo (apoditerio), la sala templada (tepidario), la sala fría (frigidario), la sala caliente (caldario) y la sala de sudoración.

 

Piscina de agua fría en el frigidarium

Las termas formaban parte de la vida cotidiana de los romanos, un punto de encuentro, por ello eran centros difusores de la cultura.

Zócalo pintado

Las paredes de algunas estancias están decoradas con frescos.Estas termas sufrieron varias reformas, llegándose a usar como vivienda. Eran mayores de lo que conocemos ya que debajo de la iglesia de San Pedro hay mas restos.

Restos de la necrópolis

Durante la Edad Media la zona se convirtió en lugar de culto y necrópolis.

Tégulas e imbrices

Las tejas romanas suelen ser de terracota, planas, con dos pestañas o rebordes a lo largo de los lados mayores.Tégulas: cubren los edificios.
Ímbrices: contienen la lluvia.