lunes, 7 de diciembre de 2015

LA GRANJA DE SAN ILDEFONSO

Es nuestro tercer y último día de viaje. Dejamos el hotel temprano, dirección La Granja de San Ildefonso. Está muy cerca, unos 20 minutos.
La primera visita es a la Real Fábrica de Vidrios y Cristales:
 http://www.realfabricadecristales.es/es/informacion/el-museo
Fue construida por Carlos III en la época de la Ilustración, Siglo XVIII.


En ella vamos a conocer el proceso de fabricación del vidrio, además de ver trabajar de cerca el cristal en sus hornos, una pareja de sopladores reproducen de manera artesanal, utilizando las antiguas técnicas, las piezas clásicas de La Granja.


También admiramos, aunque un poco apurados por el tiempo, sus salas de exposiciones, la permanente y las temporales. De estas últimas vemos: la colección de la familia Serrano y el arte de tallar el cristal del portugués Octavio Botas.
http://www.realfabricadecristales.es/es/exposiciones/cristal-de-la-granja-coleccion-familia-serrano
http://www.realfabricadecristales.es/es/exposiciones/octavio-botas-el-arte-de-tallar-el-cristal
Me parece interesante poner los enlaces para que podáis ver las preciosas piezas de cristal.



Pero creo que lo que más me gustó fue la sala de vidrieras en ella se pueden admirar veinte vidrieras del taller de Maumejean y varios cartones para su realización.
La vista ha sido toda una sorpresa, no pensaba que pudiera ser tan interesante, la recomiendo sin dudar.


Al salir tenemos unos minutos para un café, nos queda por ver el Palacio de La granja. No teníamos la vista con guía, nos lo ha conseguido Ana, que nos acompañó en Segovia y tuvo la amabilidad de contactar con Raúl, que nos va ha mostrar el Palacio.


En los jardines que hay en la entrada vemos secuoyas o abetos de más de 300 años que le regalaban al rey.
El Palacio es una de las residencias de la familia Real Española, su nombre viene de una antigua granja que tenían los monjes del Monasterio del Parral.


Fue Felipe V quien compró el edificio a los jerónimos y Teodoro Ardemans comienza la construcción del pequeño palacio y por las necesidades que se plantean, va creciendo alrededor. Se decora con gran suntuosidad, al gusto de la época.
Comenzamos la visita por el magnífico Museo de Tapices, en el se puede ver una colección de grandes tapices flamencos, confeccionados en honor de Carlos I de España.
El interior del palacio es una sucesión de salas con decoración barroca, con preciosos frescos en los techos y molduras de madera policromada. Destacan sus lamparas de vidrio de la Real Fábrica de La Granja.
El palacio ya lo había visitado, pero no la Real Colegiata construida por Teodoro Ardemans como Capilla Real, siendo luego ampliada, es magnífica.
Destaca su retablo, la sillería del coro y sobre todo la preciosa tribuna real. En ella están enterrados Felipe V e Isabel de Farnesio.


Pero la mayor atracción son los jardines con sus maravillosa fuentes. Son uno de los mejores ejemplos de jardines de Europa del siglo XVIII.


Como supondréis no se pueden sacar fotos, pero he encontrado un pequeño resumen de las dos vistas en La Granja.


Tenemos la comida reservada en el Hotel Roma, que está junto a la puerta del Palacio. Es un edificio del siglo XIX, antiguo fielato (aduana).


Tiene un comedor con una bonita decoración clásica y la comida resultó bien, con platos típicos de la zona.
Nos recoge el autobús para emprender el viaje de regreso pero aún tenemos una parada en Cuellar a una hora de viaje, aún dentro de la provincia de Segovia.


Cuando llegamos ya está lloviendo, pero decidimos ir a la parte alta del pueblo para ver el Castillo de los Duques de Alburquerquer. Es de planta rectangular con cuatro torreones en las esquinas, tres de ellos circulares.


No pudimos visitarlo, había una visita teatralizada y no teníamos tiempo.
Junto con las murallas fue declarado Monumento Artístico Nacional en 1931.


El conjunto amurallado es uno de los más importantes de Castilla y León. Está formado por dos recintos y tiene gran variedad de puertas.

Iglesia de San Esteban

Cuellar cuenta con diversidad de iglesias de estilo mudéjar que solo pudimos ver por el exterior en un pequeño paseo.
De nuevo al autobús, aún tendremos otra parada en Medina de Rioseco, con tiempo para un café.
A la hora prevista llegamos a Oviedo, Otro viaje estupendo con mis compañeros de Universidad. Ya estamos pensando a dónde será el siguiente.




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